Se dice que una fuerza es conservativa cuando el trabajo que realiza sobre un cuerpo para desplazarlo desde un punto A a otro B depende sólo de la localización de dichos puntos y no del camino seguido para llegar de A hasta B.
Ejemplos de fuerzas conservativas son la fuerza eléctrica de la ley de Coulomb, la fuerza gravitatoria o la fuerza elástica de la ley de Hooke.
La utilización de este tipo de fuerzas da lugar a que:
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Podamos calcular el trabajo de forma sencilla por medio de la energía potencial, ya que se reduce a una simple resta:
- El trabajo realizado por las fuerzas conservativas a lo largo de un camino cerrado es cero.
- Cuando movemos un cuerpo venciendo una fuerza conservativa que se opone, el trabajo realizado aumenta la energía potencial del cuerpo
- Las fuerzas conservativas conservan la energía mecánica del sistema (por ejemplo la fuerza gravitatoria)
- Las fuerzas no conservativas o disipativas disipan la energía mecánica del sistema (por ejemplo la fuerza de rozamiento)